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La cantante chilena considera un privilegio haber trabajado con los compositores colombianos Kike Santander y Estéfano. Su mejor receta para un amor amargo es fortalecerse internamente.
Continúa siendo la reina del Festival Internacional de Viña del Mar. Con su voz, belleza y carisma ha dominado al monstruo del más importante certamen chileno desde 1989, cuando actuó como invitada especial y miembro del jurado.
Hoy la poseedora de varias antorchas y gaviotas de plata seduce al exigente público de la Quinta Vergara como presentadora del festival, junto a su coterráneo, el animador chileno Antonio Vodanovic.
Su faceta como conductora del famoso evento es la que más pueden recordar los colombianos que la admiran, ya que la intérprete de temas exitosos como El Hombre que yo Amo, ¡Ay Amor! o Peligroso Amor no se presenta en este país desde 1998 cuando llegó a promocionar su álbum Todo el Amor, en el que estaba incluido su inolvidable Huele a Peligro.
Myriam Hernández, casada con el productor chileno Jorge Sanyan, su ‘manager’, madre de dos menores de 9 y 7 años y quien reside en Miami desde hace cuatro años estará de visita en Colombia, “a principios de junio, eso espero”.
Por lo pronto, puso a consideración de sus fanáticos Huellas, su nuevo álbum, compendio de sus más sonados temas.
Desde Miami Myriam Hernández habló para El Pais:
¿Qué ha pasado con usted durante todo ese tiempo que ha estado ausente de Colombia?
Desde 1998 cuando promocioné Todo el Amor no volví a Colombia. Después vino otro álbum que se llamó Más y Más. Pero lo importante es que estoy de vuelta con Huellas.
¿Qué tiene de especial Huellas?
Estoy contentísima. Es un álbum que contiene trece grandes éxitos más tres temas nuevos. Ahora promociono No me he Robado Nada, que me lo hizo especialmente el maestro Armando Manzanero.
Ha trabajado con Humberto Gatica, Armando Manzanero. ¿Qué ha aprendido de esos grandes de la música?
Muchísimo. Humberto Gatica y Armando Manzanero son grandes amigos y nos respetamos profesionalmente. Uno aprende de todos los artistas y productores con los que trabaja. He tenido la suerte de trabajar y de aprender también de Kike Santander, de Estéfano y de Carlos Calderón. Por eso en mi álbum he querido incluir a toda esta gente que ha grabado conmigo.
¿Cómo fue esa relación profesional con Kike Santander y Estéfano?
Buenísima. Cuando surgió la oportunidad de trabajar juntos estábamos felices. De Estéfano tengo La Fuerza del Amor, de Kike Santander ¿Qué te ha dado ella?, Leña y Fuego. Fue un privilegio trabajar con ellos.
¿Qué ha pasado con su escuela de Artes Vocales?
Está muy bien, sigo con la escuela. Ahora con la moda de los realities shows que tenían que ver con la música estuvo muy frecuentada por niños y niñas que querían cantar.
¿Y como maestra es muy exigente?
No tengo la oportunidad de dar muchas clases porque vivo en Miami. Cuando voy a Chile visito la escuela, hago talleres. Me gusta exigir. Lo importante es tener en cuenta que no se puede enseñar a interpretar una canción, sino saber detectar lo que cada artista tiene y ayudarlo a exteriorizarlo.
¿Cómo ha sido su faceta de modelo y presentadora?
Llegan las invitaciones y las acepto. Llevo tres años como conductora del Festival de Viña del Mar y he hecho programas en televisión. Me siento a gusto con esto, pero la verdad lo que más me apasiona en la vida es cantar.
¿Cómo fue esa primera experiencia de enfrentarse al monstruo?
Tenía nervios, pero fue lindísimo. Recuerdo con mucho cariño ese Festival porque cuando me subí esa noche al escenario yo estaba como jurado internacional y como artista invitada. Canté y ahí empezó mi vuelo, mi carrera internacional.
Entre canciones. ¿Cómo es ahora el hombre que usted ama?
(Risas) Ha madurado un poco, pero sigue siendo de mano fuerte, de mirada tierna, de sonrisa que encanta, porque esas cosas nunca se deben perder. Uno se enamora y desea que queden esos aspectos para siempre, obviamente, más maduros.
¿Le huye aún a un peligroso amor?
No, para nada. Uno huye de los peligrosos amores cuando está recién iniciando una relación. Cuando se tiene un matrimonio estable, hijos, no se le huye al amor, al contrario, uno piensa que ojalá pueda seguir creciendo con su pareja juntos siempre.
¿Todavía le huele a peligro?
Sí, es rico sentir la sensación de peligro, siempre es algo que tenemos todos los seres humanos muy recónditamente.
¿Alguna vez en la vida ha dicho no me vuelvo a enamorar?
No. Yo creo mucho en el amor y que siempre hay que estar con la puerta abierta. Estar pendientes por si el amor vuelve a tocar.
¿Cuál es su mejor receta para curarse de un amor amargo?
Fortalecerse internamente, pensar de que lo vivido siempre es parte de la vida y que a partir del sufrimiento uno empieza a crecer.
¿Qué la hace poner de mal humor?
La verdad es que soy de buen genio, pero tengo mi carácter también como buena tauro. Soy terca con lo que me propongo y defiendo mi pensamiento, lo que me gusta.
¿Qué hace Myriam cuando no está presentando o de gira?
Llevo una vida normal. Me gusta disfrutar de la naturaleza, de la playa, de mis hijos. Los voy a dejar al colegio, los voy a buscar, juego con ellos. Me gusta ver películas, leer, llamar a mis amigas.
A pesar de que son muy pocos los momentos que tengo de descanso, los disfruto al máximo.
¿Con qué asuntos es metódica y puede llegar a ser obsesiva?
Soy tremendamente metódica en mi trabajo, con lo que voy a decir y obsesiva tal vez con lo que hago. Me gusta cumplir en forma desmesurada y esto a veces me lleva a no disfrutar mucho lo que hago porque siempre me estoy exigiendo demasiado. Como que nunca encuentro que algo lo hago bien (risas).
En billboard
Canciones de Myriam Hernández que han estado en el primer lugar de la lista Billboard:
Ay Amor
Peligroso Amor
Te Pareces Tanto a Él
Herida
Un Hombre Secreto
Se me Fue
Si no Fueras Tú
Ese Hombre
Huele a Peligro